Lola Daviet, una niña de 12 años fue encontrada muerta en una maleta en el barrio de Saint Dennis, en París por Dhabia B.
La mujer, una inmigrante de 24 años de edad originaria de Argelia, declaró el lunes ante el juez que vivía con su hermana en el mismo edificio que la menor, y aprovechó que Lola llegó de la escuela para ‘arrastrarla’ a su departamento y cometer el ilícito.
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A pesar de narrar y negar los hechos varias veces, su abogado pidió respetar la presunción de inocencia, porque al parecer, la mujer tiene problemas psicológicos.
Sin embargo, los testigos afirman haberla visto con la maleta donde fue encontrar el cuerpo de la niña, las cámaras de vigilancia del edificio dieron a conocer la hora a la que la niña llegó.
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De acuerdo con la confesión, Dhabia llevó a Lola a su departamento, la obligó a bañarse y la violó.
“La agarré del pelo, le metí la cabeza entre las piernas (...), tuve un orgasmo”, aseguró el medio francés Europe 1, que tuvo acceso a la documentación del caso.
Sin embargo, las investigaciones no revelan lesiones “traumáticas de índole sexual”.
Posteriormente, la asfixió, se tomó un café, escuchó música y descuartizó el cuerpo con unas tijeras o un cuchillo.
También aseguró haber puesto la sangre de la menor y beberla y le escribió en las plantas de los pies un cero y un uno.
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A pesar de la confesión, la policía asegura que no hay pruebas de lo detallado por la sospechosa, a excepción de los números en los pies y que la niña tenía una profunda herida en el cuello.
Dhabia se retractó de lo dicho y señaló que fue ‘un sueño’.
El hombre que la ayudó a llevar el cuerpo, aparentemente a cambio de dinero, también fue imputado y otras personas que fueron detenidas ya fueron liberadas.